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Una voz imprescindible contra el silencio

El veto de Sumar a Irene Montero en las listas electorales se dejó notar en las urnas y ha conseguido hacerla cada vez más imprescindible

05/09/2023 15:14 h

Una voz imprescindible contra el silencio

El veto de Sumar a Irene Montero en las listas electorales se dejó notar en las urnas y ha conseguido hacerla cada vez más imprescindible

Si como me temo, doña Yolanda la de los vetos, la misma que con su estrategia de silenciar a Podemos y su fracaso electoral nos ha dejado a expensas de un nuevo tamayazo o del chantaje de los independentistas, pretende silenciar la voz del partido morado en el Congreso, lo que puede ocurrir es que todo ese sector de la sociedad que votó con las pinzas en la nariz al PSOE o a Sumar para evitar un gobierno de derecha extrema, se sume a los abstencionistas de izquierda a la espera de que en unos próximos comicios se recupere lo que falta: una formación política que desde la izquierda vuelva a ilusionar a un electorado que, otra vez, se está quedando sin expectativas de ser escuchado.

Es lo que pretende doña Yolanda la de los vetos tratando de dejar sin portavocía a Podemos en el Parlamento, siguiendo la directriz del Partido Socialista, cuyo único objetivo es dejar a su izquierda a una formación política con el mismo carácter minoritario y simbólico que tuvo Izquierda Unida en el pasado, sin que vuelva existir el riesgo que corrió el PSOE cuando sólo unos miles de votos lo separaron de Podemos en unas elecciones generales.

Falta saber qué parte del electorado que votó a Podemos o a Unidas Podemos, antes del amañado invento que en vez de sumar restó, se siente no representada por la línea política trazada por Díaz, tan acomodada a la del Partido Socialista que podría llegar a confundirse a poco tardar. Cabe esperar que aumente a medida que crezca el parecido, porque entre votar a la copia y al modelo ya se sabe el resultado electoral que se obtiene.

«Tengo el presentimiento de que, de darse un segundo gobierno de coalición, esta vez entre Sumar y el PSOE para evitar lo que sería sin duda un desastre para este país, el grado de satisfacción del electorado de izquierda va a ser mucho menor que el logrado en la anterior legislatura, con no haber sido el del pasado cuatrienio todo los satisfactorio que cabría esperar.»

Tengo el presentimiento de que, de darse un segundo gobierno de coalición, esta vez entre Sumar y el PSOE para evitar lo que sería sin duda un desastre para este país, el grado de satisfacción del electorado
de izquierda va a ser mucho menor que el logrado en la anterior legislatura, con no haber sido el del pasado cuatrienio todo los satisfactorio que cabría esperar.

Doña Yolanda ya está maniobrando para que así sea, si es que hace realidad que la formación política a la que debe su liderazgo y desempeño en el gobierno de la nación se quede sin la voz que le han otorgado los votos de la ciudadanía. Si a ese sector del electorado que votó a Podemos se le deja sin voz, habrá que volver a buscar como partido los votos de quienes se sienten ya o se sentirán en breve defraudados con Sumar.

Porque si se le quita la voz a Podemos, digo yo que no habrá que conformarse con el silencio. Para combatir ese silencio hay una voz que no puede quedar ausente de la escena política. El veto de Sumar a Irene
Montero en las listas electorales se dejó notar en las urnas y ha conseguido hacerla cada vez más imprescindible. Su ausencia del Parlamento va a fomentar la necesidad de que vuelva, sobre todo entre
las mujeres, a lo largo de una legislatura en la que el feminismo puede tener un destacado carácter.

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