Lucha contra la desinformación.
Desinformación.

Contra la desinformación, producir pensamiento

Tal vez por eso hace que surjan medios realmente comprometidos con los individuos, como es este canal y este medio. Lo cual resulta un indicio esperanzador. Piénsalo el 28M. Porque de ti depende.

19/05/2023 11:17 h

Contra la desinformación, producir pensamiento

Tal vez por eso hace que surjan medios realmente comprometidos con los individuos, como es este canal y este medio. Lo cual resulta un indicio esperanzador. Piénsalo el 28M. Porque de ti depende.

Cuando hablamos de pensamiento solemos referirnos a un grupo de procesos mentales que permiten que los individuos tengan la posibilidad de organizar y procesar toda la información de que disponga, desde la que acumula a través de sus sentidos, a través de la memoria y, a su vez, aplicarla a producir las explicaciones y respuestas eficientes para cada una de las situaciones que se le pueden presentar en su vida
cotidiana.

Por tanto, si observamos los modos de pensar se alude a las diferentes intervenciones sociales, que las personas han ido incorporando a lo largo de su experiencia vital a su
mentalidad. Ello supone que tienen que ver con su propia historia y con las construcciones sociales que resultan de esas interacciones. Es decir, que todos los modos de pensamiento se han creado y han ido evolucionando a lo largo del tiempo
en donde los seres humanos se han ido enfrentando a diferentes retos y situaciones.

El resultado de los mismos produce los modos de pensar que configuran cada herencia
cultural particular. Algunos consideran que existen diferentes tipos de pensamiento. Por ejemplo, el pensamiento reflexivo, crítico, analítico, lógico, sistémico, analógico, creativo, deliberativo, práctico. Su desactivación creará personas dóciles. Todos fácilmente manipulables. Máxime con una currícula educativa a medida de la restricción de la habilidad del pensar. Perverso pero real.

«Así, una sociedad marcada por comportamientos poco solidarios o cómplices con actos corruptos, dejará un rastro histórico de episodios sórdidos y poco ejemplares.»

Sin embargo, la sociedad, como conjunto humano que debe procurar el perfeccionamiento individual, deja en evidencia su fracaso moral y ético si no cumple con el deber de exigir que prevalezca lo correcto. Una muestra es la confusión de roles que las camarillas institucionales dejan al paso de sus gestiones.

Por tanto, los obispos protegen a los pederastas que habitan sus iglesias y colegios. Los jueces actúan contra las normas que producirían un progreso si se aplicasen correctamente. Los partidos políticos protegen a los corruptos y expulsan a quienes los denuncian. Las puertas giratorias cumplen con su función de permitir que las corporaciones se apropien de la riqueza colectiva. Y la juventud aparece huérfana de expectativas. El desaliento siembra que el “pensar” es inútil. Todo, en el marco de un deterioro cognitivo resultante de una concentración mediática que contribuye a que los ciudadanos, miembros afectados por esa decadencia en el buen gusto de los mensajes mediáticos, terminen aceptando “no mirar hacia arriba”.

El control mediático, tanto como el educativo, son contribuyentes a ese propósito. Tanto el sentido crítico de las audiencias, cuanto el de los propios medios. Construyen relatos que desdibujan los límites de la ética. Los modos de pensar que sugieren, hacen que culpemos a las víctimas y exoneremos a los victimarios. Sean estos sacerdotes, jueces, empresarios, políticos, líderes sociales o ciudadanos complacientes.

Creer hoy que la producción individual del pensamiento resulta cada vez más difícil, es obvio. En realidad, los dueños del Big Data y la concentración del control de los canales de comunicación hacen que, los integrantes de la sociedad, terminen por aceptar mansamente cuál es la verdad y quién tiene razón. Al menos ese es su objetivo. Diseñar un metaverso de sumisión. Ellos producen desinformación. Nosotros información.

Tal vez por eso hace que surjan medios realmente comprometidos con los individuos, como es este canal y este medio. Lo cual resulta un indicio esperanzador.

Piénsalo el 28M. Porque de ti depende.

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